En Colombia, la determinación del nivel de riesgo eléctrico se basa en la evaluación de la probabilidad de ocurrencia de un accidente eléctrico y la severidad de sus consecuencias, considerando factores como el tipo de instalación, el nivel de tensión, las condiciones del entorno y la vulnerabilidad de las personas. La normativa clave para esto es el Reglamento Técnico de Instalaciones Eléctricas (RETIE) y el Código Eléctrico Colombiano (NTC 2050).
Para determinar el nivel de riesgo eléctrico, se recomienda seguir un procedimiento que incluye la identificación de peligros, evaluación del riesgo, implementación de controles y seguimiento continuo. Este proceso debe adaptarse a la naturaleza específica de cada entorno laboral y a las tareas que se realizan.
Procedimiento recomendado:
- Se deben identificar todos los posibles peligros eléctricos presentes en el área de trabajo, incluyendo:
- Fuentes de energía: Cables, tableros eléctricos, equipos y herramientas con partes energizadas.
- Condiciones de trabajo: Ambiente húmedo, espacios confinados, trabajos en altura, proximidad a líneas eléctricas aéreas.
- Actividades: Maniobras, mediciones, ensayos, verificaciones eléctricas, trabajos en proximidad a elementos en tensión.
- Una vez identificados los peligros, se debe evaluar el riesgo asociado a cada uno, considerando:
- Probabilidad: La posibilidad de que ocurra un accidente eléctrico.
- Impacto: La gravedad de las consecuencias en caso de accidente (lesiones, daños materiales).
- Se puede utilizar una matriz de riesgos para clasificar los peligros según su nivel de riesgo (bajo, medio, alto).
- Se deben implementar medidas de control para reducir o eliminar los riesgos identificados. Estas medidas pueden ser:
- Controles de ingeniería: Mejoras en el diseño y la instalación de los sistemas eléctricos, uso de equipos de protección adecuados.
- Controles administrativos: Establecer procedimientos de trabajo seguros, señalización, capacitación del personal.
- Equipos de protección personal (EPP): Guantes, calzado, gafas, ropa aislante, casco.
- El plan de seguridad eléctrica debe ser monitoreado regularmente y revisado para asegurar que las medidas de control sean efectivas y se adapten a los cambios en el entorno laboral. Esto incluye inspecciones periódicas de las instalaciones, equipos y procedimientos, así como la capacitación continua del personal.
Consideraciones adicionales:
- Desconexión, bloqueo y señalización, verificación de ausencia de tensión, puesta a tierra y cortocircuito, y protección de la zona de trabajo.
- Solo deben ser realizados por personal autorizado y capacitado, siguiendo procedimientos específicos y utilizando equipos de protección adecuados.
- Se deben establecer protocolos para la atención de emergencias eléctricas, incluyendo primeros auxilios y procedimientos de rescate.
Siguiendo este procedimiento, se puede establecer un nivel de riesgo eléctrico y implementar medidas para proteger la seguridad y salud de los trabajadores.